Universidad Pedagógica Experimental Libertador
Instituto Pedagógico de Caracas
Departamento de Castellano, Literatura y Latín
Curso: Desarrollo del Lenguaje del Niño de 0 a 7 años
Especialidad: Educación Preescolar
Período Académico: 2008-II
Profesora: Angélica Silva
Instituto Pedagógico de Caracas
Departamento de Castellano, Literatura y Latín
Curso: Desarrollo del Lenguaje del Niño de 0 a 7 años
Especialidad: Educación Preescolar
Período Académico: 2008-II
Profesora: Angélica Silva
Autora: Leonor Y. Lozano H.
Sección: 003
Sección: 003
Los Rasgos Sustantivos del Lenguaje Humano y La Comunicación Animal
(Texto de Opinión)
(Texto de Opinión)
La comunicación es un proceso de interacción e intercambio de información. Sin embargo, este proceso en el ser humano es particular. La particularidad de la comunicación humana a la que hacemos referencia recibe el nombre de lenguaje y hace que el arte de comunicarse entre las personas se dé como un intercambio más rico. Lo anterior lleva a establecer la existencia de unos rasgos sustantivos en el lenguaje humano que de ninguna manera se encuentran en la comunicación animal y nos permiten formular la siguiente interrogante ¿Cuáles son los rasgos sustantivos más emblemáticos del lenguaje humano que no aparecen en otros sistemas de comunicación animal?
En primer lugar, es necesario aclarar algunos términos implicados en esta argumentación, por ejemplo, los rasgos sustantivos. Los rasgos sustantivos constituyen una elaboración conceptual que hacen del lenguaje humano una estructura completa, innata y adquirida en el ser humano. Igualmente, son los rasgos sustantivos los que dan las características particulares al lenguaje humano que no aparecen en otros sistemas o procesos de intercambio de información.
En segundo lugar, es de gran importancia resaltar lo afortunado que somos los seres humanos al poder expresarnos utilizando estructuras tan complejas como lo indican los rasgos sustantivos. Por ello, entre los rasgos sustantivos podemos encontrar que el lenguaje humano puede ser oral o escrito. En cualquiera de los dos casos, ese lenguaje humano es organizado, jerárquico, económico y hasta dual, ya que en todas las lenguas conocidas se identifican dos niveles de organización estructural: un nivel fonológicas y uno sintáctico. El primero implica la formación de secuencias fónicas que constituyen todos y cada uno de los sonidos que forman palabras. El segundo, implica un ordenamiento de palabras en cadenas significativas, es decir, la formación lógica y con sentido de un conjunto de palabras para emitir un mensaje y formar una oración.
En tercer lugar en cuanto a la dualidad a la que hemos referido en el lenguaje, éste existe por la combinación segmentos fónicos y valores sintácticos. Por tal motivo, el lenguaje humano se realiza en códigos o lenguas que permite la creación de un amplio número de señales verbales que no observaremos nunca en la comunicación animal. Esto es porque hasta los vacíos que pueda una persona percibir del intercambio informativo con otros pueden elaborarse nuevas señales sin crear conflicto. Esto último jamás será posible observar en los animales porque ellos se comunican a través de señales específicas ante determinada situación sin poder modificarlos en lo absoluto ya que podría correr peligro hasta su vida.
En cuarto lugar, los rasgos sustantivos más característicos del lenguaje humano y por ende no equivalentes a la comunicación animal son los siguientes: (a) El lenguaje humano opera mediante objetos semióticos arbitrarios (denominados signos lingüísticos o palabras). Ello se refiere a que el hombre le ha colocado un nombre a cada uno de los objetos que lo rodean sin que el objeto guarde relación con la palabra, ejemplo, la palabra “perro” no se parece al animal, pero ésta es la palabra designada por las personas en una lengua y distinta en otra “dog” (en el idioma inglés). Mientras que los animales simplemente tienen sonidos, ruidos, chillidos para identificar determinada situación, en algunos casos de peligro. El lenguaje humano (b) es retórico, porque esto se refiere a la utilidad que le damos los humanos al lenguaje para nuestro beneficio personal, por ejemplo, si un niño quiere que su mamá le compre un caramelo se va mostrar más cariñoso, su tono de voz va a ser bajo, va a expresar con palabras lo bien que se ha comportado y va a ofrecer las razones por las cuales su madre debería comprarle un caramelo, entre otras tácticas que puede utilizar el ser humano en este caso para recrear un beneficio personas. Por su parte, los animales tienen una comunicación más cerrada, más precisa, concreta y limitada a emitir un mensaje muy específico, sin dar oportunidad a crear estrategias o argumentos para alcanzar un beneficio distinto.
En quinto lugar, el lenguaje humano (c) co-ocurre con otros códigos humanos. Se afirma esto ya que cuando el hombre se comunica no sólo emite sonidos (palabras), también mueve la boca, las manos, su cara muestra una expresión determinada, su tono acompaña el argumento de su mensaje y mantiene una postura corporal. Es decir, el ser humano al comunicarse utiliza partes de su cuerpo con las que hace más firme y más creíble la intención de su mensaje. Mientras que los animales simplemente emiten un sonido, es decir, perciben algo que representa una amenaza y emiten una única señal posible que comunica al resto de la manada que existe algo peligroso cerca. El lenguaje humano (d) es graficable, ya que las palabras que decimos y oímos las podemos escribir según nuestro sistema de representación gráfica, para posteriormente ser leídas. Nuestras palabras pueden permanecer en la historia a través de los escritos y podemos tener un pensamiento e inmediatamente copiarlo en un papel. Los animales, por el contrario, emiten sonidos que no son compatibles por decirlo de alguna manera con nuestro sistema de representación gráfica. Y es que simplemente esa habilidad es innata y absolutamente humana.
Para concluir, luego de todo lo antes explicado queda en evidencia la respuesta a la interrogante planteada al comienzo del texto ¿Cuáles son los rasgos sustantivos más emblemáticos del lenguaje humano que no aparecen en otros sistemas de comunicación animal? Los seres humanos nos comunicamos en un nivel superior al de la comunicación animal. Las personas somos capaces de emitir palabras y organizarlas en oraciones de manera lógica y coherente. Nuestro lenguaje como facultad y la lengua como código, poseen una estructura única. Le damos nombre a señales, eventos y objetos para llamarlos de manera determinada, utilizamos el lenguaje según nuestro beneficio y el lenguaje humano co-ocurre con un conjunto de disposiciones bucales y faciales que no son posibles en la comunicación animal. En mi opinión, existe una marcada diferencia entre la comunicación animal y el lenguaje humano ya que el hombre posee un aparato fonador superior al de los animales. Los seres humanos poseen la capacidad de crear, innovar, argumentar y de mantener un diálogo. Nuestro lenguaje está caracterizado por estructuras complejas y completas, mientras que los animales sólo emiten sonidos o ruidos para dar aviso a otros miembros de su manada de una determinada situación, por ejemplo, la cercanía de un depredador. Dado el conjunto de comparaciones entre la comunicación animal y el lenguaje humano, a mi juicio, quedan evidencias suficientemente planteadas de las grandes diferencias que existen entre las anteriores.
En primer lugar, es necesario aclarar algunos términos implicados en esta argumentación, por ejemplo, los rasgos sustantivos. Los rasgos sustantivos constituyen una elaboración conceptual que hacen del lenguaje humano una estructura completa, innata y adquirida en el ser humano. Igualmente, son los rasgos sustantivos los que dan las características particulares al lenguaje humano que no aparecen en otros sistemas o procesos de intercambio de información.
En segundo lugar, es de gran importancia resaltar lo afortunado que somos los seres humanos al poder expresarnos utilizando estructuras tan complejas como lo indican los rasgos sustantivos. Por ello, entre los rasgos sustantivos podemos encontrar que el lenguaje humano puede ser oral o escrito. En cualquiera de los dos casos, ese lenguaje humano es organizado, jerárquico, económico y hasta dual, ya que en todas las lenguas conocidas se identifican dos niveles de organización estructural: un nivel fonológicas y uno sintáctico. El primero implica la formación de secuencias fónicas que constituyen todos y cada uno de los sonidos que forman palabras. El segundo, implica un ordenamiento de palabras en cadenas significativas, es decir, la formación lógica y con sentido de un conjunto de palabras para emitir un mensaje y formar una oración.
En tercer lugar en cuanto a la dualidad a la que hemos referido en el lenguaje, éste existe por la combinación segmentos fónicos y valores sintácticos. Por tal motivo, el lenguaje humano se realiza en códigos o lenguas que permite la creación de un amplio número de señales verbales que no observaremos nunca en la comunicación animal. Esto es porque hasta los vacíos que pueda una persona percibir del intercambio informativo con otros pueden elaborarse nuevas señales sin crear conflicto. Esto último jamás será posible observar en los animales porque ellos se comunican a través de señales específicas ante determinada situación sin poder modificarlos en lo absoluto ya que podría correr peligro hasta su vida.
En cuarto lugar, los rasgos sustantivos más característicos del lenguaje humano y por ende no equivalentes a la comunicación animal son los siguientes: (a) El lenguaje humano opera mediante objetos semióticos arbitrarios (denominados signos lingüísticos o palabras). Ello se refiere a que el hombre le ha colocado un nombre a cada uno de los objetos que lo rodean sin que el objeto guarde relación con la palabra, ejemplo, la palabra “perro” no se parece al animal, pero ésta es la palabra designada por las personas en una lengua y distinta en otra “dog” (en el idioma inglés). Mientras que los animales simplemente tienen sonidos, ruidos, chillidos para identificar determinada situación, en algunos casos de peligro. El lenguaje humano (b) es retórico, porque esto se refiere a la utilidad que le damos los humanos al lenguaje para nuestro beneficio personal, por ejemplo, si un niño quiere que su mamá le compre un caramelo se va mostrar más cariñoso, su tono de voz va a ser bajo, va a expresar con palabras lo bien que se ha comportado y va a ofrecer las razones por las cuales su madre debería comprarle un caramelo, entre otras tácticas que puede utilizar el ser humano en este caso para recrear un beneficio personas. Por su parte, los animales tienen una comunicación más cerrada, más precisa, concreta y limitada a emitir un mensaje muy específico, sin dar oportunidad a crear estrategias o argumentos para alcanzar un beneficio distinto.
En quinto lugar, el lenguaje humano (c) co-ocurre con otros códigos humanos. Se afirma esto ya que cuando el hombre se comunica no sólo emite sonidos (palabras), también mueve la boca, las manos, su cara muestra una expresión determinada, su tono acompaña el argumento de su mensaje y mantiene una postura corporal. Es decir, el ser humano al comunicarse utiliza partes de su cuerpo con las que hace más firme y más creíble la intención de su mensaje. Mientras que los animales simplemente emiten un sonido, es decir, perciben algo que representa una amenaza y emiten una única señal posible que comunica al resto de la manada que existe algo peligroso cerca. El lenguaje humano (d) es graficable, ya que las palabras que decimos y oímos las podemos escribir según nuestro sistema de representación gráfica, para posteriormente ser leídas. Nuestras palabras pueden permanecer en la historia a través de los escritos y podemos tener un pensamiento e inmediatamente copiarlo en un papel. Los animales, por el contrario, emiten sonidos que no son compatibles por decirlo de alguna manera con nuestro sistema de representación gráfica. Y es que simplemente esa habilidad es innata y absolutamente humana.
Para concluir, luego de todo lo antes explicado queda en evidencia la respuesta a la interrogante planteada al comienzo del texto ¿Cuáles son los rasgos sustantivos más emblemáticos del lenguaje humano que no aparecen en otros sistemas de comunicación animal? Los seres humanos nos comunicamos en un nivel superior al de la comunicación animal. Las personas somos capaces de emitir palabras y organizarlas en oraciones de manera lógica y coherente. Nuestro lenguaje como facultad y la lengua como código, poseen una estructura única. Le damos nombre a señales, eventos y objetos para llamarlos de manera determinada, utilizamos el lenguaje según nuestro beneficio y el lenguaje humano co-ocurre con un conjunto de disposiciones bucales y faciales que no son posibles en la comunicación animal. En mi opinión, existe una marcada diferencia entre la comunicación animal y el lenguaje humano ya que el hombre posee un aparato fonador superior al de los animales. Los seres humanos poseen la capacidad de crear, innovar, argumentar y de mantener un diálogo. Nuestro lenguaje está caracterizado por estructuras complejas y completas, mientras que los animales sólo emiten sonidos o ruidos para dar aviso a otros miembros de su manada de una determinada situación, por ejemplo, la cercanía de un depredador. Dado el conjunto de comparaciones entre la comunicación animal y el lenguaje humano, a mi juicio, quedan evidencias suficientemente planteadas de las grandes diferencias que existen entre las anteriores.